Cómo afrontar la pérdida del pelo y qué peluca elegir

Cómo afrontar la pérdida del pelo y qué peluca elegir

Para muchas mujeres la pérdida del cabello puede ser el peor efecto secundario del tratamiento contra el cáncer, por lo que es importante saber que la pérdida de pelo suele ser temporal. Puede llevar un poco de tiempo acostumbrarse y suponer un shock al principio, pero si se gestiona adecuadamente, no tiene por qué ser tan malo como se piensa, hay un montón de opciones.

Uno de los principales  miedos acerca de usar una peluca es que pueda parecer falso y antinatural y que todo el mundo sepa que no es tu pelo real, pero con la calidad y variedad que hay disponibles hoy en día esto no podría estar más alejado de la realidad.

En los últimos años llevar pelo falso se ha convertido mucho más en una cuestión de moda, por lo que la calidad de las pelucas y postizos ha crecido a pasos agigantados y con la cantidad correcta de personalización es muy difícil detectar la diferencia entre lo real y lo falso. Lo primero que hay que saber acerca de la pérdida del cabello como consecuencia de tratamientos médicos es que no hay reglas escritas sobre la cantidad de cabello que vas a perder y cuándo y cómo se va a volver a crecer, pero si se gestiona correctamente puedes reducir el impacto que esto podría suponer en tu vida y en tu autoconfianza.

Hemos intentado responder a algunas de las preguntas más comunes sobre pelucas y cómo elegir una.

El pelo se puede empezar a caer tan solo 2 semanas después de tu primer tratamiento y en unas 5 semanas es posible que hayas perdido todo tu cabello. Este puede ser el momento más complicado. Los diferentes tipos de tratamientos tienen diferentes resultados. Los medicamentos que se usan durante la quimioterapia pueden acabar dando como resultado una pérdida de cabello más drástica, sin embargo con la radioterapia, que se centra más en un área específica puede conllevar la perdida de pelo solo en esa área en particular. Ese es el momento para pensar sobre como lidiar con tu perdida de pelo. Si tienes el pelo largo, puede ser una buena idea cortártelo para que el impacto de la caída del cabello no sea tan dramático, además de que generalmente es menos doloroso. Este, también, puede ser el momento de empezar a pensar en una peluca.

¿Cómo elegir una peluca?

Como hemos dicho antes, hay una amplia y variada gama de pelucas disponibles y no sólo en tiendas especializadas en pelucas oncológicas, los grandes almacenes a día de hoy también tienen, así que puede ser un buen lugar para ir y probar diferentes estilos sin problema alguno. Empieza eligiendo un estilo similar al de tu cabello, no tiene por qué cuadrar perfectamente pero que sea lo más cercano al estilo que te gustaría. Lo siguiente es cortarlo a tu medida. Recuerda que recortar una peluca es para personalizarla no para cambiar su estilo completamente. Es muy difícil coger una peluca larga y cortarla y convertirla en una corta, las pelucas no tienen esa flexibilidad. Por eso es importante que elijas alguna que se parezca a lo al pelo que quieres, tu peluquero o estilista lo adaptará a ti.

Hay dos tipos de pelucas, de pelo real y sintéticas. Ambas tienen que ser tratadas con cuidado. Las pelucas de cabello real pueden parecer más naturales, pero requieren de tanto mantenimiento como tu propio pelo. Tienen que ser lavadas con champú y secadas a mano con regularidad, por lo que no es ideal si te encuentras mal durante el tratamiento. Las pelucas sintéticas son, a menudo, más baratas y fáciles de manejar, se secan solas una vez lavadas, sin embargo no duran tanto especialmente con estilos más largos que pueden encresparse al roce con la ropa.  Lo más importante al elegir una peluca sintética es la base. No suele ser por el color o por el corte por lo que se paga el dinero extra, si no por la base de la peluca y la forma en que está cosida. Otro consejo para usar una peluca es usar una red para recoger el pelo. Esto mantiene el pelo recto contra la cabeza  y mantiene la base de la peluca lejos de tocarse con cuero cabelludo sensible

Nuestro consejo sería comprar la mejor peluca para su presupuesto y necesidades. Si te gusta llevar el pelo hacia atrás de tu cara, entonces puede ser que valga la pena poner más dinero para una peluca indetectable de encaje frontal. Pelucas hechas con monofilamentos te permiten cambiar la separación para un aspecto más natural, una doble capa de monofilamento normalmente quedará más ajustada a la cabeza consiguiendo un look menos voluminoso. Prueba diferentes bases para ver cuál es las más cómoda para ti y solicita el asesoramiento de expertos sobre las diferentes opciones disponibles.

¿Todavía puedo tintarme el pelo durante el tratamiento?

Sí, pero se recomienda hacerse un test en la piel antes de cada tratamiento de color y una consulta con el médico antes del tinte es esencial. El cuero cabelludo puede estar extremadamente sensible durante este tiempo, por lo que se recomienda lavar el cabello la noche anterior y darle tiempo para asentarse al cuero cabelludo antes de aplicar cualquier tinte. También sigue el consejo de tu peluquero  sobre que color elegir ya que los resultados pueden variar durante el tratamiento.

¿Cómo hago que una peluca deje de parecer una peluca?

Un buen corte. Tener tu peluca cortada de manera profesional puede marcar la diferencia. Las pelucas por lo general tienen un 20-40% de más de pelo en ellas y esto tiene que eliminarse para que el cabello se mueva como pelo real.

También hay muchas maneras en que peluqueros capacitados para el corte de pelucas pueden hacer que parezca más natural. La elección del color del pelo debe adaptarse a tu complexión, antes que buscar algo que suponga un cambio más drástico.

Usa productos.  Se puede utilizar cualquier producto soluble en agua sobre una peluca incluyendo productos como champú seco o spray de sal de mar en las pelucas rubias para quitar brillo, suero y cera en las morenas para hacer que el cabello se mueva. Evita la laca para el cabello, que hará al pelo más rígido de lo que es normalmente.

Asegúrate de que esté en el lugar correcto y recta, esto que suena a tontería, pero la forma más fácil de identificar a una peluca es cuando no está colocada de manera adecuada. La base de la peluca debe estar unos cuatro dedos por encima de las cejas y la peluca debe ser ajustada y apretada como se requiera.